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jueves, 26 de enero de 2012

Seguimos en la biblioteca


1 de diciembre del 2011

Tras estar un día entero intentando dar con la contraseña correcta para entrar en nuestro blog, hemos conseguido descifrar el enigma. Creíamos que no lograríamos entrar más y deberíamos hacer otro blog, lo que hubiera supuesto olvidar todo el trabajo hecho hasta entonces. ¡Tanto sacrificio y esfuerzo que habrían sido derramados en vano! Aunque...echemos un vistazo a las entradas. ¡Eureca! El número de entradas demuestra nuestro trabajo. O más bien, demuestra la falta de él. Aunque es sólo en apariencia, pero bien sabemos todos que a menudo nos engañan, y esta vez no es una excepción. Detrás de las pocas entradas, se esconden largas horas de trabajo. Grabando, haciendo fotos, transportando libros y también ordenándolos. Esta última tarea corresponde a mi grupo. No os podéis imaginar el caos que reinaba entre tantas hojas de libros. Novelas, teatro y poesía convivían libremente, demasiado libremente, entre los estantes de las estanterías. Día tras día cogíamos libros, mirábamos toda su información y los volvíamos a colocar en su sitio correspondiente, al menos por el momento. Luego habrá que encontrar su lugar exacto. Queremos llegar al punto donde tan sólo haya que echar un breve vistazo general a la biblioteca para encontrar el libro que debemos encontrar.

26 de enero de 2012

Después de más de un mes ausentes, volvemos mejor que nunca con las fuerzas cargadas después de unas provechosas vacaciones de Navidad. La vuelta ha sido una cuesta arriba, pero tras pasar un par de semanas, todo ha vuelto a la normalidad. Vaya. El trabajo de la biblioteca está en un tiempo delicado. Fue temporada de exámenes antes de vacaciones, y al volver debíamos adelantar materia. Por lo cual este trabajo quedó un poco abandonado pero no olvidado, nuestras ganas de aportar nuestra ayuda a mejorar esta nuestra biblioteca. Ahora mismo las estanterías están vacías. Los libros yacen sobre las mesas porque no estaban en su debido sitio. Por fortuna, han mantenido el orden para que al volver a su lugar sean colocados rápidamente y ya en su puesto definitivo. Hemos cambiado las tareas entre los grupos. Cambiamos la gente que se dedicaba a la tecnología y cambiamos la gente que ordenaba los libros.
Ahora nos disponemos a colocar los libros definitivamente en su sitio. Esperamos que al acabar quede una biblioteca ordenada y con todo lo necesario para el estudio o el entretenimiento.

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